martes, junio 26, 2007

Innovar

De latín innovare, tomarse de nuevo, renovar, introducir una novedad. Vamos que nada de reingeniería de procesos, más bien kaizen.

Según la wikipedia: “aplicación de nuevas ideas, conceptos, productos, servicios y prácticas con la intención de ser útiles para el incremento de la productividad”.

Después de leer, hablar y reflexionar durante unas semanas, llego a una conclusión: La innovación es una consecuencia de un ambiente, una determinada cultura organizacional.

Para innovar es necesario tomar riesgos. Si no hay riesgo no hay prueba, ni cambio. Además es importante la iniciativa. Todos estamos muy a gusto como estamos. Innovar suele estar relacionado con mejorar aquellos aspectos que nos parece que funciona bien, si funciona mal hablamos de solucionar, resolver crisis… La innovación supone no estar satisfecho con aquello que parece que es suficiente. Implica exigencia y mejora continua.

Además innovar implica que podemos errar. Podemos fallar. Y si la cultura en la que estamos no nos permite cometer errores… entonces no intentaremos nada… “puedo fallar”. Para innovar es necesario una cultural de “permisividad con los errores”. Es necesario pensar en términos de aprendizaje y experiencia en vez de fallo y acierto. Una organización orientada al aprendizaje.

A nivel individual es necesario un nivel de seguridad en uno mismo alto, al igual que un alto nivel de optimismo. El proceso de innovación tiene bastantes barreras y la autoconfianza y optimismo son unas buenas características personales para superar dichas barreras.

Después está la creatividad. Una buena idea se hace buena después de muchas vueltas y muchos cambios. Después de analizarla y mejorarla desde distintos puntos de vista y por lo tanto de la contribución de mucha gente: trabajo en equipo. Un trabajo en equipo en que otra vez lo importante no es tener razón, sino tener una experiencia de aprendizaje y un alto nivel de exigencia con uno mismo y con los demás miembros.

Por esa razón pienso que cuando quieres promocionar la innovación, además de algunas propuestas “tangibles” es necesario otro tipo de acciones que promuevan tanto actitudes individuales (optimismo, autoconfianza, toma de riesgos, iniciativa, desarrollo personal, …) como colectivas (trabajo en equipo, permisividad al error, organización que aprende,…).

Etiquetas: ,

8 Comments:

At 7:15 p. m., Blogger Julen Iturbe-Ormaetxe said...

Quizá sea una cuestión de insistir para que las personas sepamos que no pasa nada por equivocarse. Creo que esto de gestionar el error debería convertirse en una asignatura obligada en cualquier licenciatura que mire a la empresa. A ver si algún día reúno las ideas en un artículo porque ese ambiente que citas debe ser permisivo con el error, pero no de cualquier manera. Hay que darle un par de vueltas.
Un saludo,
Julen

 
At 8:56 a. m., Blogger Pablo Jular said...

Totalmente de acuerdo Julen. Algunas veces tiendo, y debido a no querer enrollarme mucho, tiendo a los estremos.
No se trata de ser permisivos con cualquier error. Ni siquiera ser permisivos con los errores. Pero si en buscar experiencias y no culpable. Se trata de no esconder los errores, sino de ser transparentes con ellos y que sirvan a toda la organización, primero para que te ayude a solucionarlos, después para que todos aprendan de ellos.

Espero ese par de vueltas sobre como tratar los errores dentro de la organización...

 
At 12:21 p. m., Blogger Àlex Vallès said...

Hola
Se tiene la tendencia en buscar culpable siempre en lugar de encontrar responsables. Será por cuestión de nuestra cultura católica.

Sin errores no se aprende pero no aprendemos de los errores (y por eso se repiten) poruqe nos encargamos de ocultarlos, nos sentimos culpables pero reponsables y de esta manera creo que no se puede avanzar.

Lo mismo pasa con el esfuerzo. Se valora el hecho de esforzarse pero no de los resultados de ese esfuerzo; es decir, del esfuerzo como proceso pero no como resultado.

Creo que si cada año en las empresas se hicieran una conferencia acerca de los errores que se cometen y crear una especie de biblioteca de los errores en donde en primera persona explicaramos el proceso de nuestro error, su admisión, y su acción correctora cn los beneficios esperados dentro de un clima de confianza.
Cuantos más errores has tenido, más veces has hecho cosas beneficiosas para la empresa.

Aquello de "erro luego existo"

En fin, ... esperemos más comentarios

 
At 5:14 p. m., Anonymous Anónimo said...

Pero, Pablo, si no hacemos y nos equivocamos, ¿cómo aprendemos? Los libros no son suficiente.

 
At 9:45 a. m., Blogger Pablo Jular said...

¿y quién ha dicho que no tenemos que hacer? Totalmente de acuerdo contigo que los libros no son suficiente.
Igual que la acción sin reflexión no es suficiente. Equilibrio.

Tenemos que hacer, hacer cosas nuevas, reflexionar sobre ellas, buscar el desarrollo y la mejora constante. Y además hemos de ser consciente que este camino implica cometer algunos errores. Con los cuales debemos de ser tolerantes, aunque como dice Julen con límites.

 
At 1:32 p. m., Anonymous Anónimo said...

¿Qué ¿ya te cansaste de "liderar personas"?

 
At 5:23 p. m., Anonymous Anónimo said...

Está bien, Pablo. Te interpreté mal y hablamos de lo mismo pero de distinta manera.

Me refería a pensar en términos de aprendizaje y experiencia cuando pensaba en no equivocarse. Interpreté que no podemos equivocarnos. Te entendí mal.

Estoy de acuerdo con la visión positiva de ser más permisivo con los errores. Yo lo soy con los míos pero no siempre encuentro a otro que haga igual. Siempre aparecerá alguien dispuesto a resaltarlos con regocijo. ¿Puede ser?

 
At 12:51 p. m., Anonymous Anónimo said...

una forma metafórica de hacerlo es mediante la música :

http://sinerzia.com/es/musicaina.php

video divertido de trabajo en equipo y música.

saludos

 

Publicar un comentario

<< Home